actualizado el 12 de octubre del 2010
Cinco siglos de prohibición del arcoiris en el cielo americano
EL OTROCIDIO
El Descubrimiento: el 12 de octubre de 1942, América descubrió el capitalismo. Cristóbal Colón, financiado por los reyes de España y los banqueros de Génova, trajo la novedad a las islas del mar Caribe.
En su diario del Descubrimiento, el almirante escribió 139 veces la palabra oro y 51 veces la palabra Dios o Nuestro Señor. Él no podía cansar los ojos de tanta lindeza en aquellas playas, y el 27 de noviembre profetizó: Tendrá toda la cristiandad negocio en ellas. Y en eso no se equivocó. Colón creyó que Haití era Japón y que Cuba era China, y creyó que los habitantes de China y Japón eran indios de la India; pero en eso no se equivocó.
Al cabo de cinco siglos de negocio de toda la cristiandad, ha sido aniquilada una tercera parte de las selvas americanas, está yerma mucha tierra que fue fértil y más de la mitad de la población come salteado. Los indios, víctimas del más gigantesco despojo de la historia universal, siguen sufriendo la usurpación de los últimos restos de sus tierras, y siguen condenados a la negación de su identidad diferente. Se les sigue prohibiendo vivir a su modo y manera, se les sigue negando el derecho de ser. Al principio, el saqueo y el otrocidio fueron ejecutados en nombre del Dios de los cielos. Ahora se cumplen en nombre del dios del Progreso.
Sin embargo, en esa identidad prohibida y despreciada fulguran todavía algunas claves de otra América posible. América, ciega de racismo, no las ve..
… a pesar que digan o comenten que este vídeo esta equivocado y hasta que las imágenes seleccionadas son graciosas, lo que sucedo es la perdida de identidad cultural. Todo forma parte de la globalización.
o
actualizado el 12 de octubre del 2009
Día de la Raza
En la mayoría de los países hispanoamericanos las fiestas del 12 de octubre reciben el nombre ¨Día de la Raza¨en conmemoración del avistamiento de tierra por el marinero Rodrigo de Triana en 1492, luego de haber navegado más de dos meses al mando de Cristóbal Colón a lo que posteriormente se denominaría América.
La fecha marca el nacimiento de una nueva identidad producto del encuentro y fusión de los pueblos originarios del continente americano y los colonizadores españoles.
Sin España, o mejor dicho sin Europa o los Colonizadores, no hay historia, ya sea para bien o para mal. Es con ellos que comienza la historia oficial, así que repudiar no sirve a nada. Ahora lo que hay es de desmitificar la mediocre historia oficial y ponerla en un contexto mas realista para comprender el origen y como esta mezcla de mentalidades transformo un continente en lo que hoy se llama¨Latinamerica¨.
0
post escrito el 12 de octubre del 2008
La empresa del Descubrimiento
Después que los turcos conquistaron Constantinopel y cortaron las rutas que conducían a las tierras de las especias, encontrar nuevos caminos para llegar allí se convirtió en una cuestión de vida o muerte para las economías de las naciones europeas.
El objetivo esencial de la época de los grandes descubrimientos geográficos, al final de la Baja Edad Media y los comienzos de la Edad Moderna, consistió en llegar a la India. Los pueblos peninsulares, España y Portugal, se colocaron resueltamente a la cabeza del movimiento, sintetizando, por un lado, los conocimientos de la cartografía de la Escuela Mallorquina -fruto de los esfuerzos del cartógrafo portugués Enrique de Avis y Lancaster, «El Navegante» (1394-1460)- y por el otro, las exploraciones de portugueses, andaluces y castellanos por el Atlántico. Portugal se lanzó a la empresa de la India por la ruta del Este, siguiendo un periplo africano, coronado en 1486 por Bartolomeu Dias (1450-1500), descubridor del cabo de Buena Esperanza y la llegada de la flota de Vasco de Gama (1469-1524) a la India en 1498. Mientras tanto, España lo hizo con Cristóbal Colón (1451-1506) por la ruta del Oeste, lo que en definitiva implicó el hallazgo del continente americano y del océano Pacífico, elementos que se interponen entre el Atlántico y la costa asiática.
Los Reyes Católicos, financiadores de la expedición, se preocuparon en seguida por obtener las garantías legales sobre las tierras descubiertas en las «Indias». Ello planteó, de nuevo, el problema de las relaciones hispano-portuguesas. El laudo emitido en Roma con el nombre de bula Inter Caetera («Entre los demás») por el papa Alejandro VI el 4 de mayo de 1493, otorgó a los españoles la posesión de las tierras situadas a cien leguas al oeste de las Azores o de Cabo Verde. El subsiguiente Tratado de Tordesillas del 7 de junio de 1494, ratificó la división del mundo en dos hemisferios: el oriental, portugués, y el occidental, español. La línea de demarcación entre ambos quedó fijada a 370 leguas al oeste de Cabo Verde.
¿Quiso realmente Colón llegar a la India, a Asia, por occidente, basándose en los conocimientos de la época, que consideraban más corto el camino de la navegación siempre hacia el Oeste?
Está claro que el viaje de Cristóbal Colón en 1492 no cumplió con el propósito de encontrar una nueva ruta a oriente, pero a cambio de ello significó para España la conquista y usurpación de enormes territorios de una incalculable riqueza.
Existen indicios de que las Antillas Mayores habían sido visitadas por europeos años antes de la llegada de Cristóbal Colón. Al efecto, Fray Bartolomé De Las Casas, escribe: ¨tuvieron o tenían de haber llegado a esta isla Española otros hombres blancos y barbados como nosotros antes que nosotros no muchos años¨.
Esa hipótesis explicaría la presencia de algunas indias de tez blanca entre los indígenas de piel oscura y el insólito hallazgo, en el tercer viaje de Colón, de proyectiles de artillería, en un paraje de la Española que no había sido explorado.
Si nos fijamos en las rutas seguidas por el Descubridor en sus cuatro viajes a América nos daríamos cuenta que siempre enfiló la línea de los vientos alisios y regresó por los vientos contrarios y la corriente del Golfo, a la altura de Virginia.
Parece evidente que Cristóbal Colón sabía bien que encontraría ricas tierras para la Corona y para él mismo.
Todos esos datos indican que Cristóbal Colón tuvo que haber tenido noticias de anteriores viajes al continente que él descubriera. Ello explicaría la redacción de las Capitulaciones de Santa Fe (pactos suscritos entre los Reyes Católicos y Colón con relación a cómo se habrían de repartir los beneficios de la empresa del descubrimiento) en las que se menciona lo que Colón ¨ha descubierto en las mares océanos¨ concediéndole al insigne marino genovés un descubrimiento que todavía estaba por hacerse.
Una vez que los reyes católicos decidieron apoyar el proyecto de Cristóbal Colón surgió una dificultad: Cristóbal Colón quería a cambio dinero (el 10 por ciento de todo lo que se encontrara en oro, plata y piedras preciosas), poder (Virrey y Gobernador de todas las tierras descubiertas); y ascenso social (título de Gran Almirante de la Mar Océana). Imagínese usted, amigo lector, lo que significaba el hecho de que un desconocido marino portugués se convirtiera así como de repente en un Gran Almirante con los mismos honores que disfrutaba el Almirante de Castilla, vinculado este último a la familia de la más alta nobleza castellana, por demás, tío de Fernando el Católico.
En principio, los Reyes Católicos no se mostraban dispuestos a complacer a Colón en sus desmedidas pretensiones de dinero, poder y gloria. Y estuvieron a punto de solicitarle al genovés que se marchara. Colón se mantuvo firme, siempre dispuesto a jugarse el todo por el todo. Colón aguantó todo y acabó venciendo. Diría con orgullo: ¨Pensando lo que yo era me confundía mi humildad; pero pensando en lo que yo llevaba me sentía igual a las dos coronas¨ ¿ Jactancia? No, seguridad sí. Cristóbal Colón sabía adónde iba, y estaba muy seguro de lograr su objetivo. Lo que para otros era duda, para él era certidumbre. Fray Bartolomé De Las Casas, que conoció bien a Colón, lo pintaría de cuerpo entero con esta frase: Tan cierto iba a descubrir lo que descubrió y hallar lo que halló como si dentro de una cámara con su propia mano lo tuviera¨
Después de vencer muchísimos obstáculos, el 3 de agosto de 1492, la flota colombina levó anclas para iniciar desde el puerto de Palos su espectacular singladura, atracando en las Canarias seis días después. El 6 de septiembre de 1492, la flota colombina puso rumbo hacia el Poniente, iniciando una hazaña que todos tenían por imposible. Treinta y dos días después, en la noche del 11 al 12 de octubre, Rodrigo de Triana, daría la voz tan deseada: ¡ Tierra a la Vista! y Colón tomó posesión de la tierra en forma, por el Rey y por la Reina, con pregón e bandera real extendida.
La Corona inició rápidamente la colonización del Nuevo Mundo. Así, en 1502, la expedición de Nicolás de Ovando (1460-1511) marcó el comienzo de la población de las Antillas y el origen del imperio español en América y la incorporación del pueblo hispano a la tarea colonizadora.
Los reyes delegaron los asuntos de América en el Consejo de Indias y los colonos españoles en las Antillas recibieron repartimientos de indios (institución parecida a la encomienda medieval castellana), explotaron yacimientos auríferos y ensayaron el cultivo de la caña de azúcar. Los primeros resultados fueron descorazonadores: la dificultad que entraña todo proceso de aculturación y los excesos de los encomenderos motivaron una alarmante despoblación indígena.
Samuel Eliot Morison, un historiador de Harvard, biógrafo de Colón, escribió: «Quien fuera el que inventara este espantoso sistema, como único método de producir oro para la exportación, el responsable del mismo fue solo Colón. Aquellos que huyeron a las montañas fueron cazados con perros, y de los que escaparon se ocuparon el hambre y la enfermedad, mientras miles de pobres criaturas, en su desesperación tomaron veneno de manioca para acabar con su miseria».
A partir de 1507, cuando el cosmógrafo alemán Martin Waldseemüller (1470-1522) se refirió en su «Cosmographiae Introduction» a una cuarta parte del mundo, a la que dio el nombre de América – en homenaje al florentino Américo Vespucio.
En 1513, Vasco Núñez de Balboa (1475-1519) atravesaba el istmo de Panamá y descubría el mar del Sur (océano Pacífico). Inmediatamente comenzó la búsqueda de un paso que comunicara el Atlántico con el Pacífico por el sur de América. Fernando de Magallanes (1480-1521) lo conseguiría en 1520. Al descubrir el estrecho que hoy lleva su nombre reinabo ya Carlos I.
Con el nuevo monarca, Carlos I, pueden considerarse terminados los ensayos previos para dar paso a una entidad política y cultural nueva: las «Indias Españolas», el primer sistema colonial organizado de la época moderna.o
Lamentablemente, fueran españoles, ingleses, etc. etc. la verdad es que el humano por naturaleza es saguinario, ambicioso, destructor y demás, desde la llegada a la America, no trataron por ambicion de convivir con los mismos seres, solamente de destruir y apoderarse de todo, pero estamos en un mundo redondo, sin poder salir de el como si la riqueza se la llevarian al supuesto cielo, cual cielo, quien ha ido y regresado para dar testimonio comprobatorio de que existe, el ser humano es cruel y lo será hasta que ( él mismo) entienda que se morira y extinguira como todo o nó), ejemplo ( se dice que hay un dios, donde está, quien lo puede demostrar, si yo estoy en un lugar, ejemplo mi casa, al frente está una calle. luego la ciudad XX, luego, el estado, luego el pais, luego, el continente, luego el mar, que hago veo al cielo lo infinito, después habrá algo?, y luego otra cosa, y luego otra, no hay final de nada, analicese, no hay fin, claro deberá haber algo mas, si es el infinito, se debe respetar el derecho a la vida, al amor, la tolerancia, solidaridad, compartimiento, producir para vivir como la naturaleza, seremos capaces de entenderlo y aceptarlo no se sabe ( creo que nos extinguiremos) mis respetos a todos y a todo
Pingback: 12 de Octubre del 1492 – día el descubrimiento del nuevo mundo | La historia de una América antigua
Pingback: Una fiesta continental de aniversario del 12 de octubre 1492 | La historia de una América antigua
gracias por su comentario de cristobal colon
Hola a todos, comparto con vosotros un artículo sobre leyendas y cosmología mesoamericana. Un abrazo para todos!!!
Pingback: Anónimo
Sin embargo, los Taínos sobrevivieron
Los taínos nunca antes habían visto a hombres blancos, vestidos, con barba o barcos como que – pensaban que estas personas deben ser desde el cielo. Así que los taínos salieron a recibirlos, como era su costumbre, – que seguramente se han cansado y con hambre – y trajeron a los viajeros comida, bebida y regalos. Estos los taínos fueron buenos nadadores y que algunos de ellos nadaron derecho a los barcos de unos tres kilómetros de la costa.
Esa misma noche Colón escribió en su diario que estas islas eran muy tensamente pobladas por gente pacífica que sólo tenían armas sencillas y que con tan sólo 50 de sus hombres y sus armas podría hacerse cargo de ellos. Mucho se ha dicho sobre el deseo de Colón para convertir los «salvajes» al cristianismo, pero muy poco se dice acerca de su búsqueda de oro, aunque se menciona el oro de Colón en su diario 70 veces en sus dos primeras semanas en las islas. El primer día, Colón «tomó» varios niños indígenas a bordo de su barco para que le mostraran dónde estaba el oro.
Colón pasó los próximos dos meses en busca de oro. Justo cuando estaba a punto de regresar a España, en la víspera de Navidad su nave la Santa María encalló y se hundió. El pueblo Taíno le ayudó a recuperar todos los elementos rescatables. Un problema surgió en que ahora todos los marineros que habían acompañado a Colón no caben en los dos restantes (y más pequeñas) buques. Así fue construido un fuerte utilizando la madera recuperada de la Santa María y 39 hombres fueron dejados en un fuerte que Colón llamó La Navidad. Poco después, Colón zarpó hacia España, teniendo algunos de los nativos y las aves, alimentos y plantas para mostrárselo al Rey y la Reina.
Colón fue recibido de una manera nunca antes vista y sus historias del «Nuevo Mundo» se escucharon con respeto. El rey Fernando y la reina Isabela de inmediato entregaron a Colón diecisiete grandes naves, ganado y suministros para regresar a sus tierras recién adquiridas para colonizarlos. Esta vez no había escasez de hombres dispuestos a inscribirse en el viaje por mar: 1.200 hombres se registraron con entusiasmo para el viaje y la oportunidad de hacerse rico rápidamente con el oro que se encuentra en el Nuevo Mundo.
A su llegada a La Navidad en el segundo viaje, Colón encontró el fuerte quemado hasta los cimientos y los 39 hombres que había dejado atrás habían sido asesinados. Parece que los marineros que se quedaron atrás se habían «portado mal», como dicen nuestros libros de historia, pero su «mala conducta» fue al menudo en forma de violación de las mujeres y menores y robo de todo lo que ellos querían.
Uno de los líderes locales, un caciques llamado Caonabo, se había reunido con los otros líderes y todos menos uno eran de acuerdo en que los dioses nunca se habrían comportado en la forma como los hombres que eran los españoles, y decidieron que los españoles tuvieron de irse. Por eso lo elimino a los españoles y la amenaza que representa para su pueblo.
Colón se comprometió a encontrar a Caonabo y tomar represalias. Desde ese momento terminó la vida como los taínos conocieron. Colón obligó a todos de ellos mayores de 14 años para trabajar en las minas de oro en busca de oro para los españoles. Los que se negaron fueron asesinados. Los que no hicieron su cuota de oro les cortaron las manos y los dejaron desangrarse hasta la muerte. Las mujeres Taíno se les dio a los españoles para hacer con ellas lo que deseaban. Los campos se quedaron sin vigilancia y no rindieron para producir suficiente alimentos para los taínos y los españoles, cuyas entregas se habían agotado. Todos estaban hambrientos, muchos Taínos murieron de hambre, otros trabajaban hasta la muerte. Fueron golpeados, torturados, violados, esclavizados y asesinados. Colón encontró Caonabo – que lo engañaron para capturarlo – y lo metieron en un barco que fue enviado a España y no se supo más de el.
Cuando llegó el momento de Colón regreso a España, no tenía suficiente oro para pagar los costos de su expedición, por lo que hizo que sus hombres reunieron a 1.000 de los taínos más grande y más fuertes. Pero sólo cabían 500 de ellos en las apestosas bodegas de los barcos. Colón lo llevó a bordo para que se venderán en el mercado de esclavos en Sevilla para recaudar dinero para pagar el Rey y la Reina, y le dio los otros 500 Taínos a los colonos españoles. Más de 250 de los taínos murieron en el camino hacia España, y sus cuerpos fueron arrojados por la borda.
Cuando Colón regresó por tercera vez, no había cambiado mucho, todavía había poco de oro y los colonos obligan a los taínos brutalmente a buscarlo. La escasez de alimentos fue tan grave que se dijo que los españoles alimentaron a sus perros con los bebés de los Taíno. El estado de ánimo entre los taínos era de desamparo y la desesperación era total y absoluto. Algunos tomaron sus propias vidas para escapar de las brutalidades y humillaciones. Los colonos, en su defecto para hacerse rico rápidamente como esperaban, amenazaron con una rebelión contra Colón. Corrió la voz al Rey y la Reina de la situación y Colón fue enviado en cadenas de vuelta a España para ser juzgado por su mala gestión «de las islas». Fue despojado de sus títulos y todos los reclamos de las tierras que había «descubierto».
La gente de allí, una vez orgullosa y fuerte, se redujo de un estimado de 8 millones a 60 mil en 10 años. Los que quedaron, se escondieron corriendo en lo alto de las colinas tensamente arboladas y las montañas.
No hay problemas, el contenido de mi blog es gratis y para uso no comerciales lo puedes reproducir con mucho gusto!
¡Felicitaciones es un excelente Blog! Desearía tener su autorización para reproducir este discurso en mi bloger. Saludos cordiales
UN DISCURSO SIMPLEMENTE ESPECTACULAR!!!!!
Con lenguaje simple, que era trasmitido en traducción simultánea a más de un centenar de Jefes de Estado y dignatarios de la Comunidad Europea, el Cacique Guaicaípuro Cuatemoc logró inquietar a su audiencia cuando dijo:
«Aquí pues yo, Guaicaipuro Cuatemoc he venido a encontrar a los que celebran el encuentro. Aquí pues yo, descendiente de los que poblaron la América hace cuarenta mil años, he venido a encontrar a los que la encontraron hace solo quinientos años. Aquí pues, nos encontramos todos. Sabemos lo que somos, y es bastante. Nunca tendremos otra cosa.
El hermano aduanero europeo me pide papel escrito con visa para poder descubrir a los que me descubrieron. El hermano usurero europeo me pide pago de una deuda contraída por Judas, a quien nunca autoricé a venderme. El hermano leguleyo europeo me explica que toda deuda se paga con intereses aunque sea vendiendo seres humanos y países enteros sin pedirles consentimiento.
Yo los voy descubriendo. También yo puedo reclamar pagos y también puedo reclamar intereses. Consta en el Archivo de Indias, papel sobre papel, recibo sobre recibo y firma sobre firma, que solamente entre el año 1503 y 1660 llegaron a San Lucas de Barrameda 185 mil kilos de oro y 16 millones de kilos de plata provenientes de América.
¿Saqueo? ¡No lo creyera yo! Porque sería pensar que los hermanos cristianos faltaron a su Séptimo Mandamiento.
¿Expoliación? ¡Guárdeme Tanatzin de figurarme que los europeos, como Caín, matan y niegan la sangre de su hermano!
¿Genocidio? Eso sería dar crédito a los calumniadores, como Bartolomé de las Casas, que califican al encuentro como de destrucción de las Indias, o a ultrosos como Arturo Uslar Pietri, que afirma que el arranque del capitalismo y la actual civilización europea se deben a la inundación de metales preciosos!
¡No! Esos 185 mil kilos de oro y 16 millones de kilos de plata deben ser considerados como el primero de muchos otros préstamos amigables de América, destinados al desarrollo de Europa. Lo contrario sería presumir la existencia de crímenes de guerra, lo que daría derecho no sólo a exigir la devolución inmediata, sino la indemnización por daños y perjuicios.
Yo, Guaicaipuro Cuatemoc, prefiero pensar en la menos ofensiva de estas hipótesis. Tan fabulosa exportación de capitales no fueron más que el inicio de un plan «»MARSHALLTESUMA»», para garantizar la reconstrucción de la bárbara Europa, arruinada por sus deplorables guerras contra los cultos musulmanes, creadores del álgebra, la poligamia, el baño cotidiano y otros logros superiores de la civilización.
Por eso, al celebrar el Quinto Centenario del Empréstito, podremos preguntarnos: ¿Han hecho los hermanos europeos un uso racional, responsable o por lo menos productivo de los fondos tan generosamente adelantados por el Fondo Indo americano Internacional?
Deploramos decir que no. En lo estratégico, lo dilapidaron en las batallas de Lepanto, en armadas invencibles, en terceros reichs y otras formas de exterminio mutuo, sin otro destino que terminar ocupados por las tropas gringas de la OTAN, como en Panamá, pero sin canal. En lo financiero, han sido incapaces, después de una moratoria de 500 años, tanto de cancelar el capital y sus intereses, cuanto de independizarse de las rentas líquidas, las materias primas y la energía barata que les exporta y provee todo el Tercer Mundo.
Este deplorable cuadro corrobora la afirmación de Milton Friedman según la cual una economía subsidiada jamás puede funcionar y nos obliga a reclamarles, para su propio bien, el pago del capital y los intereses que, tan generosamente hemos demorado todos estos siglos en cobrar. Al decir esto, aclaramos que no nos rebajaremos a cobrarles a nuestros hermanos europeos las viles y sanguinarias tasas del 20 y hasta el 30 por ciento de interés, que los hermanos europeos les cobran a los pueblos del Tercer Mundo.
Nos limitaremos a exigir la devolución de los metales preciosos adelantados, más el módico interés fijo del 10 por ciento, acumulado solo durante los últimos 300 años, con 200 años de gracia. Sobre esta base, y aplicando la fórmula europea del interés compuesto, informamos a los descubridores que nos deben, como primer pago de su deuda, una masa de 185 mil kilos de oro y 16 millones de plata, ambas cifras elevadas a la potencia de 300. Es decir, un número para cuya expresión total, serían necesarias más de 300 cifras, y que supera ampliamente el peso total del planeta Tierra. Muy pesadas son esas moles de oro y plata. ¿Cuánto pesarían, calculadas en sangre? Aducir que Europa, en medio milenio, no ha podido generar riquezas suficientes para cancelar ese módico interés, sería tanto como admitir su absoluto fracaso financiero y/o la demencial irracionalidad de los supuestos del capitalismo. Tales cuestiones metafísicas, desde luego, no nos inquietan a los indios americanos. Pero sí exigimos la firma de una Carta de Intención que discipline a los pueblos deudores del Viejo Continente, y que los obligue a cumplir su compromiso mediante una pronta privatización o reconversión de Europa, que les permita entregárnosla entera, como primer pago de la deuda histórica…»
porque día de la raza y no día de duelo?
Mayas, Incas y Aztecas, todos ellos imperios que se forjaron mediante la opresión y esclavitud de pueblos mas débiles….tanto así que muchos de esos pueblos se unieron a los españoles para luchar en contra de sus opresores…..que fácil es contar solo un lado de la historia
Hace mucho tiempo que el 12 de Octubre, en el Perú no se celebra el día de la raza. Porque celebrar “el día de la raza” es totalmente absurdo.
Sin embargo debo decirle que aunque todos los sudamericanos se “rasquen con una coronta de choclo” (una manera de decir – aunque le pese -) los europeos conquistaron “todo el continente americano” y ahora de lo que debemos preocuparnos los americanos, es de tratar de vivir entre nosotros, en paz y armonía, aunque muchos piensan y hacen lo contrario.
Considero que no se debe celebrar el 12 de octubre como dia de la Raza, no es lo adecudo, el 12 de octubre del 1492, comienza el exterminio, la opreció, la masacre, la esclavitud de todo un continente, la abolicion de civilizaciones, y culturas, es eso lo que de debe conmemorar. el decubrimeinto hechos por piratas, corsarios y mercenarios llegado a américa a viloar y saquear
Es interesante leer en diferentes libros y blogs sobre como los Europeos casi exterminaron un continente
Es interesante leer en diferentes libros y blogs sobre como los Europeos casi exterminaron un continente, lapidaron sus propiedades y no contentos con eso impusieron su religion; que estaba dividida entre ellos mismos por conflictos de poderes religiosos y asi mismo trajeron su racismo.que hoy por hoy sigue lastimando a la humanidad y esto Gracias a Cristobal Colon y a los Reyes Catolicos.???
Muy buen contenido, lo felicito por el mismo, su blog es muy interesante y didáctico.